Lo que empezó siendo un pequeño nicho de mercado, es ya un concepto que cada vez cuenta con más usuarios alrededor del mundo. Las bicicletas eléctricas han ganado popularidad con los años y el número de personas que las eligen para desplazarse no deja de crecer, debido fundamentalmente a lo ecológicas y asequibles que son y a la sencilla y óptima movilidad que ofrecen.
Emprendedores de todo el mundo se han sumado a esta tendencia y, con el paso de los años, no han dejado de aparecer en el mercado nuevos modelos de bicis eléctricas a los que se suman cada vez más equipos y accesorios que permiten adaptar una bicicleta manual y convertirla en eléctrica. La última novedad es un kit muy sencillo de montar, hasta el punto de que puedes hacerlo tú mismo sin la necesidad de contratar los servicios de un profesional. En WikiDriver sabemos que los ciclistas apuestan siempre por opciones accesibles y económicas así que, a continuación, os explicamos cómo funciona este novedoso kit, que proporcionará un rendimiento y seguridad incomparables.
¿De qué se compone este kit exactamente?
Muchas marcas han optado por sacar su propio kit al mercado, que te permite transformar tu bici de siempre en un vehículo eléctrico. Aunque cada uno cuenta con distintos sistemas eléctricos, podemos enumerar los accesorios básicos que encontrarás en prácticamente todos ellos para poder montar tu bici eléctrica (¡y que funcione!):
- Un ‘Power Pack’ – que contiene la batería y el controlador
- Un cable para el manillar
- Una rueda de motor – que deberás sustituir por la rueda delantera de tu bici actual
- Un sensor de pedal
Estos cuatro aparatos se adaptan a cualquier bicicleta y son fáciles de instalar por los mismos usuarios.
¿Por qué debo pasarme a la bici eléctrica?
Las ventajas de montar en bicicleta eléctrica frente a desplazarte en coche son múltiples:
Mejora nuestra salud: si decidimos alternar entre el modo manual y el eléctrico lo agradeceremos, ya que eso nos va a permitir mantenernos en forma.
Es la opción de transporte más económica de todas. Además, te resultará mucho más barato comprar el kit y convertir tu bici tradicional en una eléctrica, que comprarte una eléctrica de primera mano.
La bicicleta eléctrica es también un vehículo que se adapta a la ciudad. Su tamaño es el adecuado para poder transportarla en autobús o metro, en caso de querer simplificar tu recorrido en distancias largas.
Además, es un vehículo muy fiable y de mantenimiento fácil, tan solo es necesaria una revisión al año. Únicamente tendrás que acordarte de cargar la batería en casa, ¡y listo!
Dejando a un lado los beneficios que nos aporta a nivel personal, son muchos los que han dado ya el paso de moverse pedaleando por la ciudad en lugar de conducir. La bicicleta respeta el medio ambiente, reduciendo las emisiones de carbono y la contaminación del aire, es un medio de transporte rápido dentro de la ciudad y una de las grandes ventajas que aporta es que descongestiona el tráfico urbano.
Sin embargo, entre las preocupaciones recurrentes de los ciclistas, está la de dónde aparcar la bici eléctrica una vez has llegado a tu destino. Si la usas como medio de transporte para ir al trabajo, es probable que puedas dejarla en la oficina sin que suponga una molestia. Pero, cuando se trata de dejarla en la calle, siempre tenemos en la cabeza la posibilidad de que nos la dañen o roben. Afortunadamente, hoy en día existen muchos parkings y zonas reservadas para poder estacionar tu bici. La empresa Vadebike ofrece estaciones para aparcar todo tipo de bicis por toda la ciudad de Barcelona. También, te recordamos que existen abonos para bicis que te permiten poder aparcarla las 24 horas del día.