Cómo llevar la bici en el coche: la guía completa

Si la bicicleta es un elemento esencial de nuestro equipaje cuando viajamos, es muy importante saber cómo debemos transportarla para cumplir con la normativa, evitarnos multas innecesarias y circular de forma segura. Hoy en día disponemos de muchas opciones, desde llevarla en el interior del vehículo hasta transportarla en el exterior, colocada en el techo o bien en la parte posterior con un portabicicletas para el portón trasero, uno integrado o con una bola de remolque. En este artículo de Wikidriver te explicaremos cómo llevar la bici en el coche de forma legal y segura y te aclararemos algunas cuestiones relativas a su transporte. Así que si eres aficionado al ciclismo, ¡lee con atención y toma nota!

Ir en bici es uno de los deportes al aire libre que más permiten disfrutar del entorno, descubrir nuevos lugares y evadirnos sobre ruedas mientras atravesamos caminos, bosques, sierras y praderas. Además, hoy en día disponemos de múltiples aplicaciones móviles como Wikiloc, Strava o Google Maps para crear rutas en bici, una cómoda y práctica forma de configurar el recorrido sin tener que planearlo con antelación. Pero para poder descubrir nuevos parajes sobre ruedas, a menudo antes debemos hacer algunos kilómetros en coche y transportar las bicicletas de un sitio a otro. A continuación repasaremos qué dice exactamente el reglamento de Tráfico al respecto y las distintas posibilidades que tenemos a nuestro alcance para llevar la bicicleta en el coche, desde las más económicas a las más costosas y sofisticadas:

Normativa sobre cómo colocar la bici en el coche 

El reglamento de la DGT permite el transporte de bicicletas en un vehículo, siempre que se cumplan con una serie de condiciones que, seguidamente, analizaremos: 

• Instalación: las bicicletas tienen que colocarse de forma totalmente segura sin que puedan caerse, desplazarse, arrastrar ningún objeto ni producir ruidos u otras molestias.
• Uso de una placa supletoria y de luces accesorias: si utilizamos un portabicicletas trasero que tape parcial o totalmente la matrícula o los pilotos posteriores deberemos llevar una placa supletoria con la matrícula y luces accesorias.
• Limitación a las dimensiones del portabicicletas: la DGT establece restricciones respecto a la altura máxima permitida de este elemento, así como al espacio que puede ocupar lateral y posteriormente. En concreto, especifica lo siguiente:
  • Altura máxima: 4 metros
  • Anchura máxima: el portabicis no puede exceder la anchura total del vehículo; si es así, habrá que desmontar las ruedas. Si la bicicleta ocupa todo el ancho del vehículo, habrá que señalizarlo en cada extremo con la señal V-20, cuyas líneas rojas deberán colocarse de manera que formen una V invertida
  • Espacio posterior que puede sobresalesalir de la planta del vehículo: el  portabicicletas puede sobresalir un máximo del 15 % de la zaga; así, por ejemplo, en un coche de 4 metros podrá sobresalir un máximo de 60 cm. 
• Uso de un retrovisor derecho: si el portabicicletas impide la visión por el retrovisor interior, habrá que llevar otro exterior en el lado derecho.

Así pues, a la hora de colocar el portabicicletas vale la pena asegurarnos de que cumplimos con lo que establece la normativa, ya que no hacerlo puede comportarnos una multa de hasta 200 euros.

Llevar la bici dentro del coche, la solución más económica 

Ahora que ya tenemos claro qué dice el reglamento respecto a cómo hay que llevar las bicicletas en un vehículo, veamos qué opciones existen en el mercado para poder transportarlas. 

En primer lugar, la opción más simple y económica consiste en llevarlas dentro del automóvil. Pero, ¿cómo colocar la bici en el coche y asegurarnos de que quede bien sujeta? Si cabe en el maletero (caso de las bicis plegables) deberemos colocarla aquí; si no, habrá que llevar la bici dentro del coche abatiendo los asientos, protegiendo el habitáculo, desmontando la rueda delantera o trasera y, sobre todo, utilizando cinchas y correas para que quede bien sujeta (de lo contrario, en caso de colisión podría convertirse en un peligroso proyectil). 

Es importante recordar que podemos ser sancionados con una multa por llevar la bici dentro del coche si no está bien sujeta, de modo que vale la pena asegurarse de que está bien agarrada y evitarnos los 200 euros de sanción.

• Ventajas: solución económica, cómoda y rápida, no ofrece resistencia al viento ni afecta a la aerodinámica del coche.
• Desventajas: mayor dificultad para cargar y descargar e imposibilidad de usar los asientos traseros para el transporte de pasajeros.

Portabicicletas para el portón trasero: fácil y accesible 

Si preferimos un sistema que no implique ocupar e inutilizar el interior del vehículo, podemos optar por portabicicletas exteriores. Entre los varios tipos que hay, una opción muy popular es el portabicicletas para el portón trasero, que se agarra a la parte posterior del coche mediante soportes mecánicos y cinchas y es relativamente fácil de instalar. 

Aunque pueden dejarse colocados de forma fija, lo más recomendable es montarlos y desmontarlos cada vez para evitar recibir golpes al maniobrar y aparcar. 

• Ventajas: compatibilidad con diferentes tipos de vehículos, fáciles y cómodos de instalar y de usar, posibilidad de llevar hasta cuatro bicicletas sin desmontar.
• Desventajas: requieren colocar una placa supletoria con la matrícula, luces accesorias y la señal V20, dificultad para maniobrar dadas las mayores dimensiones del vehículo,  obstrucción de la visibilidad, peor aerodinámica. 

Portabicicletas para el techo: buena visibilidad trasera y óptima sujeción

Este modelo también está muy extendido entre los aficionados al ciclismo, si bien no es demasiado cómodo ya que hay que colocar la bicicleta a pulso sobre el techo del automóvil. 

Dentro de este tipo de solución, existen varios modelos. El primero es aquel que coloca las bicicletas al revés, es decir, con las ruedas hacia arriba sujetando el manillar y el sillín, si bien esto puede terminar dañando la bici. En el segundo modelo se utiliza un raíl en el que se coloca la rueda trasera de la bici en la parte posterior y las punteras de la horquilla en la parte delantera, hecho que implica desmontar la rueda delantera. Se trata de un sistema firme y seguro, pero conlleva tener que montar y desmontar una de las ruedas y almacenarla en el portamaletas. Finalmente, el último modelo es un poco más caro que los anteriores, pero es seguro y no requiere desmontar nada. Tiene una estructura compuesta de un raíl sobre el que descansan las dos ruedas para que no se muevan y uno o dos brazos que sujetan el cuadro de la bici para que mantenga la verticalidad.

• Ventajas: buena visibilidad trasera.
• Desventajas: limitación de la altura (en caso de vehículos grandes), dificultad para cargar y descargar la bici, necesidad de disponer de una baca o de barras de techo para poder instalar los enganches del portabicicletas y peor aerodinámica.

Bola del remolque, la opción perfecta para transportar más de una bici 

La tercera solución para transportar una bicicleta en el exterior del vehículo son los portabicicletas que se enganchan a la bola del remolque, sin necesidad de soportes adicionales a la carrocería ni al chasis del coche. 

Para anclar el portabicis hace falta un soporte específico que envuelva la bola del remolque; una vez colocado, ya podremos montar una o varias bicicletas sobre los raíles del portabicicletas, según el modelo. 

Como los portabicicletas para el portón trasero, lo mejor es desmontarlos cuando no los usemos para evitar golpes al maniobrar y aparcar.

• Ventajas: facilidad de carga y descarga y posibilidad de transportar más de una bici. Además, la mayoría de modelos son basculantes, de modo que se inclinan hacia atrás incluso con las bicicletas colocadas para poder abrir el maletero del vehículo.
• Desventajas: requieren un enganche para remolque previo a instalar el portabicis, implican un aumento del consumo de combustible (debido a la peor aerodinámica del vehículo y una mayor carga), así como más dificultad para maniobrar y aparcar dadas las dimensiones del conjunto. Tampoco se puede exceder la carga máxima del remolque y hay que colocar una placa supletoria con la matrícula, luces accesorias y la señal V20.

Portabicicletas integrado

Como ya hace tiempo que la industria automovilística detectó un aumento creciente de ciclistas que se desplazan en coche para practicar este deporte, en estos últimos años ha ido ideando nuevas soluciones para facilitar el transporte de bicicletas y captar a este tipo de público. 

Hace unos años la marca Opel creó el sistema FlexiFix, un portabicicletas integrado en el vehículo que se abre y se cierra en la parte posterior como si fuera un cajón. De este modo, el portabicis se extiende para poder colocar las bicis y, tras usarlo, se cierra para que no sobresalga del vehículo y quede perfectamente integrado en él. 

La primera generación del FlexFix permitía el transporte de dos bicis y la segunda generación ha ampliado la capacidad para colocar hasta cuatro.

• Ventajas: portabicicletas ya incorporado al coche, sistema muy cómodo ya que no hay que montar y desmontar continuamente y que menos afecta al comportamiento del vehículo.
• Desventajas: requiere colocar una placa supletoria con la matrícula, luces accesorias y la señal V20, solo es compatible con coches nuevos y no permite la instalación posterior de una bola de remolque. Además, tiene un importante coste añadido (al tratarse de un accesorio original que hay que solicitarlo a fábrica, hecho que supone entre 500 y 700 euros más).

A modo de conclusión, esperamos que este artículo te haya sido de utilidad y te haya ayudado a resolver las dudas acerca de cómo transportar una bici en coche, sobre todo ahora que, con el buen tiempo, las rutas en bici son una magnífica opción. Ahora que ya conoces las distintas opciones que existen, es cuestión de valorar cuál te conviene más, echar cuentas e instalarla para poder preparar tu próxima salida sobre ruedas.