Sufrir de un neumático deshinchado es el mal común de los conductores sin distinción de edad. Las causas pueden ser varias, desde el desgaste habitual por el uso hasta algún elemento en el camino que acelere el daño. Cuando esto ocurre estando en la vía, la solución más rápida es cambiarlo nosotros mismos y llevarlo a revisión en cuanto podamos para que un profesional lo revise y determine si es necesario poner uno nuevo.
Se acercan los días de vacaciones y los desplazamientos por carretera son el escenario más común para sufrir de un pinchazo o un mal funcionamiento de las ruedas. Una vez notas que hay una fuga de aire, es necesario detenerte y buscar la manera de reemplazar el neumático dañado por uno sano que te lleve a tu destino; seguir con el neumático deshinchado puede dañar la rueda y pone en peligro tanto tu integridad como la del resto de conductores en la vía.
Hablamos de los pasos para cambiar un neumático deshinchado no sin antes recordarte que cuentas con nuestros parkings en toda España para dejar descansando tu coche cuando no lo necesites.
¿Qué necesitas?
- Un neumático de repuesto
- Un gato hidráulico
- Un juego de llaves
- Chaleco reflectante
- Triángulos de emergencia
Pasos para cambiar el neumático
- Lo primero que debes hacer es detenerte en un lugar plano, poner el freno de mano y una cuña (puede ser un pedazo de madera o una roca grande) para asegurar que el coche no se deslice mientras cambias el neumático. Un consejo: intenta ubicarte siempre por el lado contrario del tráfico. Es el lugar más seguro para hacerlo.
- Prepara todo para poder llevar a cabo el cambio: despliega los triángulos de emergencia a unos 50 mts. de distancia, de manera que puedan ser vistos desde unos 100 mts. aproximadamente. En carreteras de doble sentido es obligatorio tener un triángulo para señalizar la parte de adelante y otro para la parte de atrás. En autopistas y autovías bastará con un solo triángulo. Si el accidente ocurre de noche, debes señalizar también con las luces de emergencia, el alumbrado del coche y las luces reflectantes.
- Ubica el punto de anclaje más cercano al neumático y ubica el gato allí. Empieza a elevarlo lentamente y cuando hayas logrado levantar un poco el vehículo, pon el neumático de recambio tumbado bajo el coche tan cerca de ti como puedas; de esta manera si el gato llega a fallar, el neumático recibe el golpe y evita que el coche choque contra el suelo.
- Afloja las tuercas con una llave de cruz y solo empieza a soltarlas cuando el coche esté medianamente elevado del suelo. Quítalas una por una y saca la rueda.
Pon la rueda de recambio en reemplazo y ubica el neumático deshinchado bajo el coche como hiciste anteriormente. Una vez ajustado, empieza a encajar las tuercas y apretarlas una por una, con movimientos circulares y con la suficiente fuerza como para que queden bien encajadas. - Una vez el neumático quede fijado, es necesario que compruebes la presión del mismo cuando antes. Si es un neumático de emergencia, debes tener en cuenta que no podrás circular a más de 80 km/h y que, según el fabricante, tendrás un número limitado de kilómetros antes que se dañe también.