La movilidad sostenible está en auge ahora más que nunca. En España, los coches eléctricos ganan cada vez más adeptos, pero es cierto que a este tipo de motor le ha costado integrarse completamente en el mercado, entre otras cosas, porque presenta algunas desventajas frente al coche tradicional que muchos usuarios no quieren dejar de lado. Ahora se le suma a este auge la opción de los coches con hidrógeno, que funcionan con una pila especial y no hacen combustión al generar la energía. En Wikidriver estamos comprometidos con hacer de la movilidad sostenible un hábito diario, así que abordamos este tema a continuación.
Parece que de lo único que saben hablar estos días los medios especializados en motor es de la esperanza de los coches con hidrógeno como alternativa de transporte verdaderamente sostenible. El País publicaba este año una entrevista con Thiebault Paquet, ingeniero jefe de Toyota Europa, donde se mostraba esperanzado con respecto al hidrógeno como una mejor solución que las pilas eléctricas.
Las declaraciones de Paquet solo ratifican que la empresa asiática ha hecho ya una apuesta clara por los vehículos híbridos, con modelos como el Mirai Toyota, que al funcionar con hidrógeno solo emite vapor de agua por el tubo de escape. Estas declaraciones aparecieron un mes después de que Hyundai anunciara una inversión de 5.950 millones de euros para la fabricación de 500 mil pilas de combustible para turismos y 200 mil pilas combustibles para comerciales. La firma surcoreana tiene prevista esta inversión en el marco del plan FCEV Vision 2030 con el que busca expandir el coche de hidrógeno y que está en marcha desde finales de 2018.
¿Cómo funcionan los coches con hidrógeno?
Un coche de hidrógeno funciona con hidrógeno diatómico como fuente de energía y para ello, usa una pila de combustible. Por su parte, una pila de combustible es un dispositivo electroquímico que tiene la capacidad de transformar directamente la energía química que contiene un combustible (en este caso hidrógeno) en energía eléctrica sin combustión. Las pilas están formadas por dos electrodos –ánodo y cátodo–, que es donde se produce la oxidación del hidrógeno y la reducción del oxígeno, lo que hace que esta pila funcione como una batería y que, a través del hidrógeno se genere la electricidad que mueve el vehículo. El Hyundai Nexo es un buen ejemplo de esto.
La pila de combustible representa no solo una alternativa de transporte renovable, sino que, como dice Carlos Cancela, la tecnología del hidrógeno se presenta como una buena oportunidad para que España se convierta en líder europeo gracias a su potencial energético y la cantidad de sol que recibe por su posición peninsular.
Con este método de generación de combustible, el coche de hidrógeno soluciona varias de las desventajas que presentan los coches eléctricos. En primer lugar, el tiempo de carga no tiene punto de comparación: mientras que un coche eléctrico necesita de 6 a 8 horas de carga para completar un recorrido de 200 km., los coches con hidrógeno solo necesitan 5 minutos para lograr una autonomía de 800 km. aproximados en la ciudad.
La otra ventaja es que es realmente cero emisiones y completamente renovable. Cuando cargamos un coche eléctrico, incluso en casa, no sabemos de dónde proviene esa energía (de una central eléctrica, de una central nuclear, quemando carbón…), y su batería está hecha de litio y cobalto, que generalmente se obtiene de países subdesarrollados y sí generan emisiones contaminantes. Por el contrario, la pila de combustible funciona con hidrógeno y emite vapor de agua, lo cual lo convierte en un coche cero emisiones que, con su masificación, será mucho más económico. Lo único que expulsa un coche de hidrógeno es vapor de agua.
Coches de hidrógeno disponibles en España
España dejará de matricular coches que produzcan emisiones contaminantes a partir del 2040, es decir que ningún vehículo turístico o comercial que produzca CO2 podrá circular para esa fecha, en el marco de la futura Ley de Cambio Climático y Transición Energética. El único modelo desarrollado completamente que se conoce es el Hyundai NEXO, que se convirtió también en el primer vehículo matriculado en España para probar que esta tecnología está lista para ser lanzada y comercializada en el mercado.
Por otro lado, BMW, Toyota y Mercedes apuestan de momento por el mercado alemán, anunciando el desarrollo de varios modelos propulsados con hidrógeno que podrían salir al mercado en el 2025.