¿Mi coche? ¡No puede ser! Así te quedas cuando descubres que has sido víctima de un robo, y es que según un estudio realizado por el Grupo Detector, se estima que en España al menos 100 vehículos son robados cada día. Pero, ¿cuál es el robo más común en coches? Desde Wikidriver te contamos todo lo que necesitas saber para evitar ser víctima de un robo.
La probabilidad de sufrir un robo de coche no depende únicamente de la marca o modelo, sino también de la ciudad o incluso de la zona en la que se reside. En concreto, un estudio realizado por la UNESPA, asociación empresarial que agrupa las entidades aseguradoras de España, destaca que durante el 2018 las provincias con mayor probabilidad de robo de coches fueron: Melilla, Ceuta, Cádiz, Sevilla, Las Palmas, Málaga, Murcia, Almería, Huelva y Granada. Mientras que otros datos hacen énfasis en Madrid, Barcelona, Málaga, Alicante, Valencia y Vizcaya.
Pero, sabes con exactitud ¿qué se entiende por “robo” cuando a coches nos referimos? Todo lo que esté relacionado con una sustracción del vehículo, robos parciales de partes o componentes y todos aquellos daños ocasionados producto de la situación.
En este sentido, es importante diferenciar entre “robo” y “hurto”, conceptos que suelen generar mucha confusión cuando hablamos de coches. Así pues, en ambos casos hablamos del hecho de querer adueñarse de un bien ajeno, no obstante la existencia de violencia determina una importante diferencia.
En el robo sí existe violencia, es decir, que se emplea la fuerza o amenaza para conseguir el propósito. Todo lo contrario ocurre con el hurto, puesto que no existe ningún tipo de intimidación o acción violenta a la hora de querer apropiarse del bien ajeno.
Cabe mencionar que, tradicionalmente, el hurto más común en coches estaba relacionado con la finalidad de utilizarlo y tenía como actores a personas con cierto nivel de experiencia, sin embargo el panorama actual es bastante distinto: hoy día los ladrones están más interesados en aprovechar las piezas y componentes del coche ya sea de manera individual o en su conjunto para su posterior venta. ¿Quieres saber de cuáles se tratan? Sigue leyendo.
Sin duda alguna, la tendencia apunta a que los atracadores buscan las piezas que sean más fáciles de desmontar. Hablamos de:
1. El catalizador: pieza de fácil sustracción y cuyo valor en el mercado negro es bastante elevado principalmente por los materiales con los que está fabricado. Ya sea para venderlo como recambio, o bien por separado para aprovechar los metales, este sigue siendo una de las piezas favoritas de los ladrones, y de hecho ha sido la misma Policía Nacional quien ha advertido sobre este asunto.
2. Las ruedas: el robo de llantas y neumáticos sigue siendo muy común en nuestro país, sobre todo si hablamos de coches de alta gama. Los ladrones suelen robar de noche y se ayudan de un gato para elevar el vehículo y desmontar las ruedas. En el mercado negro, pueden vender estas piezas por separado y obtener un doble beneficio.
3. Radios y navegadores: el equipo multimedia de los coches suele ser uno de los componentes más atractivos para el ladrón, principalmente por la tecnología que incorporan que cada vez es mucho más avanzada.
4. Accesorios deportivos: ¡el robo que se ha puesto de moda hace algunos años! Si eres de los que tiene a punto el vehículo con accesorios costosos, ten cuidado porque puedes ser la próxima víctima de quienes se buscan la vida “fácil”. Los talleres ilegales de “tunning” suelen ser los intermediarios entre el ladrón y el cliente final que, en la mayoría de los casos acude a ellos sin tener conocimiento alguno de la procedencia ilegal de dichas piezas.
5. El volante: no es muy difícil de desmontar y la mala noticia para el propietario es que repararlo puede llegar a alcanzar hasta los 2.000 euros dependiendo del daño causado no solo al mismo soporte, sino también al sistema de luces o intermitentes.
¿Cómo actuar si eres víctima de un robo en tu coche?
En primer lugar te aconsejamos ponerte en contacto con la policía. Es imprescindible interponer una denuncia telefónica inmediatamente te hayas dado cuenta del robo, y después acercarte personalmente a la comisaría con tu documentación personal y la del vehículo.
Además procura no tocar nada del interior del coche, facilitando la investigación de la policía y búsqueda de huellas de los ladrones. Asimismo, intenta no usar el vehículo a menos que sean las mismas autoridades quienes te soliciten trasladarlo a algún sitio para examinarlo. Finalmente, no dejes de lado ningún detalle e indica todo lo que te han robado.
Ser víctima de un robo de coche es una de las situaciones más engorrosas que pueden existir, por lo que siempre es fundamental contar con un seguro que incluya cobertura contra robo e incluso hurto. De esta forma, es siempre posible gozar de la garantía que supone una indemnización por los daños ocasionados. Asimismo, es importante estacionar nuestro coche en un lugar resguardado como un garaje o parking público para tener un mayor control y seguridad del vehículo.