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Periódicamente los medios de comunicación y las publicaciones especializadas en motor se hacen eco de nuevas tecnologías y avances en el sector automotriz, una de las industrias que más invierte en i+D y en la cual la innovación es crucial para su desarrollo y crecimiento. Tal es así que grandes marcas del sector como Tesla, Audi, BMW, Mercedes o Volvo están investigando y desarrollando nuevos tipos de baterías, nuevas fuentes de combustible, sistemas de carga más eficientes, económicos y capaces de alargar la autonomía de los automóviles, además de mejoras para seguir avanzando en la conducción autónoma de vehículos, entre otras innovaciones. En este artículo de Wikidriver te contaremos cuál es la última tecnología en coches para estos próximos años, así que si te gusta estar al día de las novedades del mundo del motor, te recomendamos que sigas leyendo.
Seguidamente analizaremos cuáles serán las principales innovaciones y nuevas tecnologías de los coches de esta década para conseguir que sean más eficientes, sostenibles, seguros, económicos y, a la vez, ofrezcan mayores prestaciones:
Drones: ¿los vehículos del futuro?
Desde hace algunos años, los drones se utilizan para una amplia variedad de tareas comerciales, científicas y recreativas: entrega de paquetes de última milla y otros procesos logísticos, prevención de incendios, tareas de rescate, de videovigilancia, inspección de infraestructuras, etc. También se usan en el sector primario (agricultura de precisión) y en el sector audiovisual (cine y televisión), por citar otros ejemplos. Pero además de todas estas aplicaciones, próximamente también podrían hacerse un hueco en el espacio aéreo como drones de pasajeros o taxis aéreos y constituir una alternativa a los medios de transporte terrestre tradicionales.
Encontramos numerosos prototipos de estos nuevos vehículos aéreos en varias partes del mundo: en Catalunya y en Madrid, con la empresa Advanced Air Mobility (AAM) y Umiles, respectivamente; en Europa, con el City Airbus Next Gen o el Audi Pop.Up Next y en Asia con el EH216, desarrollado por la firma china de movilidad aérea EHang, entre otros proveedores de movilidad aérea urbana.
Nuevas fuentes de combustible
Además de los vehículos eléctricos e híbridos, que en los últimos años han mejorado mucho sus características técnicas, prestaciones y autonomía, grandes marcas del sector también se están esforzando en investigar y desarrollar nuevas fuentes energéticas que no dependan de los carburantes fósiles: nos referimos a los ecocombustibles, los vehículos de hidrógeno y los coches con placas solares, tres alternativas que podrían contribuir de manera decisiva a descarbonizar el sector del transporte y la movilidad terrestre.
Actualmente en nuestro país pueden adquirirse dos coches que funcionan con hidrógeno, el Toyota Mirai y el Hyundai Nexo, y también se espera que pronto Toyota empezará a comercializar en España su modelo Prius PHEV, que incorpora placas solares en el techo capaces de recargar la batería por completo y ampliar la autonomía del vehículo.
Vehículos de conducción autónoma
Aún no disponemos de vehículos completamente autónomos, pero desde hace décadas varias firmas automotrices de distintos puntos del planeta se están esforzando en ello.
La Unión Europea establece seis niveles de conducción autónoma que definen el grado de autonomía de los coches. En esta escala, que va desde vehículos sin ningún tipo de automatización (nivel 0) hasta la automatización plena (nivel 6), actualmente los modelos más avanzados del mercado se sitúan en un punto medio (niveles 3 y 4), con vehículos en las cuales las tareas de dirección, aceleración, frenado y control del entorno las asume el coche y no el conductor, y las de recuperación del automóvil en caso de contingencia van parcialmente a cargo del vehículo.
Los principales productores de este modelo de coches son las compañías norteamericanas y europeas como Tesla, Google, Toyota, Nvidia, Aurora Innovations, General Motors, Intel, Ford, Daimler y Bosch, y los fabricantes asiáticos AutoX, Baidu y Nissan.
Nuevos sistemas de carga inalámbrica (estática y dinámica)
Las principales debilidades de los coches eléctricos son la falta de puntos de recarga, el tiempo de carga de las baterías y su autonomía. La carga inalámbrica podría ser la solución a estos problemas, ya que permite la carga del vehículo sin tener que enchufarlo físicamente a la corriente, como ya ocurre en la actualidad con los teléfonos móviles.
A su vez, la carga inalámbrica se divide en estática y dinámica. Como su nombre indica, en el primer caso los automóviles se recargan cuando está estacionados en un lugar concreto, mientras que en el segundo supuesto, los vehículos son capaces de recargar las baterías mientras se circula por las vías (previamente acondicionadas con paneles eléctricos situados debajo del pavimento para permitir dicha recarga). Esto se traduce en menor necesidad de recarga, mayor autonomía, vehículos más más económicos y más ligeros (ya que las baterías pueden ser de menor tamaño porque no necesitan tener tanta capacidad de almacenamiento).
Baterías de electrolito sólido
Tal como hemos comentado con anterioridad, las baterías son uno de los puntos flacos de los vehículos eléctricos. Hoy en día la mayoría de las baterías de litio están compuestas de electrolito líquido (una sustancia derivada del petróleo que puede ser inflamable o filtrarse), pero recientemente la industria automovilística ha desarrollado una variante mucho más segura, económica y que aporta mayor autonomía a las baterías: nos referimos a las baterías de electrolito sólido.
La principal diferencia entre ambas es el estado sólido del electrolito, que reduce la posibilidad de incendio de las baterías y permite una recarga más rápida del coche. Sin embargo, aunque ofrecen interesantes ventajas, las baterías de electrolito sólidas también tienen algunos aspectos a mejorar, como su complicado proceso de diseño y los altos costes de fabricación.
Baterías con química dual
En la línea de mejorar la capacidad y la eficiencia de las baterías para mejorar los kilómetros de autonomía de los coches híbridos y eléctricos, en los últimos años la industria automotriz también está investigando en las baterías con química dual, es decir, una sola batería que combina dos clases de química: una con una alta densidad energética, ideal para los viajes largos y, otra, menos densa, más adecuada para los trayectos cortos. De este modo, las baterías con química dual utilizan de forma más eficiente la energía necesaria para cada trayecto, alargando así su ciclo de vida útil.
Carga bidireccional y sistemas V2G
Estamos acostumbrados a pensar en la carga de un vehículo eléctrico como un proceso unidireccional, en el que enchufamos el coche a la corriente y este la recibe para poder funcionar. Sin embargo, hoy en día también existe una tecnología de carga bidireccional llamada V2G (del inglés Vehicle-To-Grid), que permite a un vehículo eléctrico interactuar de forma inteligente con la red almacenando energía en sus baterías.
Así, el automóvil extrae energía de la corriente para poder recargar en los periodos de menor consumo (por ejemplo, de noche) y la devuelve cuando hay más demanda eléctrica, de modo que ayuda a equilibrar la oferta y la demanda y el suministro de electricidad. Además del V2G, también hay otras tecnologías similares que permiten reaprovechar la energía eléctrica que acumulan los coches eléctricos: la V2H (Vehicle-to-Home), mediante la cual un automóvil eléctrico puede suministrar electricidad concretamente a una casa o un edificio (en lugar de devolverla a la red general) o la V2L (Vehicle-to-Load), que permite suministrar energía eléctrica a otro vehículo de este tipo, dispositivo o herramienta.
Resumiendo, en este artículo te hemos explicado cuáles son las principales novedades tecnológicas que actualmente está investigando y desarrollando la industria automotriz para producir mejores vehículos en términos de eficiencia, sostenibilidad, prestaciones y seguridad. Estas son solo algunas de las innovaciones destacadas del momento, pero existen muchas otras que seguro que seguirán desarrollándose en los años venideros (como la mejora de los sistemas operativos de los coches, la innovación en la producción de vehículos para reducir el impacto ambiental, etc.). Y por si todo esto no fuera poco, habrá que sumarle las novedades tecnológicas que nos aguardan en el Salón del Automóvil de las principales ciudades del país y en las principales ferias tecnológicas y electrónicas europeas y mundiales, así que habrá que seguir la actualidad muy de cerca para ver qué nos deparará el mundo del motor en los próximos años.